¨Noche a solas¨ cuento/Antologia

 noche a solas



Eran las 11 de la noche. Mi papa me había dicho que esa noche saldría y no volvería hasta el día siguiente.  Aunque me mostraba tranquila, por dentro sentía mucha ansiedad la cual no podía definir si era no querer estar sola o tener miedo de quedarme sola.

A eso de las 12 comienzo a intentar dormir, el corazón me latía tanto que sentía que iba a explotar. Mi cabeza no paraba de pensar mil escenarios los cuales temían que sucedan. El insomnio se sentía como un laberinto del que no podía escapar.

Decido buscar un vaso de agua para poder despejar la cabeza y en mi coherencia del momento distraer a mi mente. En el camino a la cocina veo la puerta de entrada entreabierta. Al ver esa imagen sentí como la presión me bajaba y las piernas me temblaban. No era algo que podía suceder, ya que todas las noches al llegar a casa cerraba bien la puerta conscientemente. 

Rápidamente me pego a la puerta y la trabo con todos mis recursos y hasta empujo la puerta con el cuerpo para que nadie pudiera entrar. Mi primer pensamiento que surgió ante esa situación fue que alguien había intentado entrar. MI MAS GRANDE MIEDO.

Todas las puertas de los departamentos de mi edificio tienen una pequeña ventanita antigua, con rejitas, donde solo podría pasar un dedo. Es ahí donde se me ocurre mirar por alli a ver si me respondía la duda de mi miedo. A lo que veo directamente en la ventanita de enfrente un rostro que me esta observando entre la oscuridad de su departamento. Se veía a un joven de mi misma edad, con el pelo rapado y un accesorio que no me borrare de la mente. Tenia puesto, rodeando su cabeza, una bandana TURQUESA, brillante, nunca había visto algo igual, cuanto mas lo miraba mas me llamaba, su rostro me atemorizaba y su bandana me hipnotizaba. Fueron 10 segundos en silencio pero los 10 segundos mas tenebrosos. A lo que ese silencio es interrumpido por otro joven que se encontraba a mi derecha bajando las escaleras. Cuando devuelvo la vista al de enfrente,  veo que estaba saliendo del departamento corriendo hacia la misma dirección que el otro joven. 

Se rompe este silencio tan vacío con un grito diciendo ¨ya vimos tu cara¨, a lo que yo le respondo ¨y yo las de ustedes¨, pero cuando me estoy dirigiendo al teléfono para pedir ayuda, escucho que me devuelven diciendo, ¨pero nosotros sabemos tu nombre¨. Al escuchar esto me paralice, llame a la policía aunque los jóvenes ya habían desaparecido. Esperaba a la policía dentro de mi departamento, pegada a la puerta, yendo y viniendo ansiosa a la ventanita. Cuando llegaron me interrogan y van a tocar la puerta de enfrente. A lo que abre la puerta una anciana la cual no comprendía la situación y nos comento que vivía sola...

Por muchos días no pude dormir y hasta por unos meses no pase por mi casa. Luego de dos meses vuelvo, todo parecía estar en paz y logre conciliar el sueño esa noche. 

La mañana siguiente ya había dejado atrás lo que esa noche me había hecho vivir. Con ganas de poder seguir adelante después de que esas imágenes me atormentaban todos los días.

Me preparo para salir a hacer las compras y asi volver a acomodarme, cuando abro la puerta de entrada un color muy llamativo llama mi atención al lado de mis pies, bajo la cabeza y es ahí donde veo la bandana turquesa con un mensaje diciendo ¨pero nosotros sabemos tu nombre¨.




Comentarios

  1. bien creado el suspenso, desde la narradora en primera persona, me gustó, Paloma

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